

Viví en El Julan hace más de 1000 años, tal como actualmente se contabiliza el paso de las estaciones.
Habité en amplias casas de piedra, en compañía de mi gran familia: abuelos, padres, tíos, hermanos, hijos,… También utilicé para mi refugio abrigos, cuevas naturales y cabañas más frágiles.
Mi pueblo bimbache se dedicó a muchas tareas, pastoreo, agricultura, caza, recolección marina y terrestre, procesado y elaboración de comida y las industrias necesarias para nuestro trabajo y comodidad.
Pasé mi vida dedicada al trabajo de la piel, descuerando, limpiando, curtiendo, cortando, y confeccionando ropas y recipientes. Para ello necesité piedras unas veces afiladas como cuchillos, otras como buriles, rasponas también, y precisé de realizar agujas con los huesos de los animales y peces, empleando los tendones y fibras vegetales como hilo… Puedo decir que fue mi trabajo el que me mató… porque utilicé también como herramienta mis propios dientes, aguzando con ellos los tendones de animales y los materiales que usé para hacer hilos. Al poco tiempo mis dientes se afilaron en forma de bisel y sufrí dolorosas enfermedades bucales que me produjeron graves infecciones. Pese a los cuidados de mi gente, con remedios naturales conocidos desde antiguo y a pesar de los ruegos a los dioses, finalmente fallecí muy joven, a unos 22 años…
Ahora descanso, envuelta en pieles, en el lugar de mis ancestros, rodeada de mis familiares, depositada en una cueva natural tapada con piedras para garantizar mi descanso. Mi cama es un tablón de madera de sabina, y tengo junto a mi mis útiles de trabajo, algunas ofrendas que me acompañan en mi último viaje.

Ruta estrella de la isla de El Hierro por uno de los parques arqueológicos mejor conservados del Archipiélago Canario. Una ruta que requiere concertar cita para su realización. La oficina de turnos y pedidos esta a cargo de la señorita Haridian, teléfono: 618 445 285
Os añado también el enlace oficial de la web del Cabildo de El Hierro sobre el Parque Cultural de El Julan: click


El coste de la ruta, obligatoriamente guiada, varía según la modalidad que escojamos, modalidad que una vez contactemos con la «oficina de turnos y pedidos» nos explicarán con detalle. El servicio y atención que recibimos por parte de todos los trabajadores que están a cargo del Centro de Interpretación de El Julan fue impecable, sin ellos hubiese sido imposible encontrar unos grabados realmente impresionantes, así como, una detallada información a lo largo de toda la ruta por parte del guía.
Tiempo atrás bajar era gratuito, simplemente solicitabas un permiso y bajabas en solitario, que decir que no encontré ni un solo grabado, solo pude llegar a admirar el Tagoror. Por otro lado, y viendo el incivismo latente tan extendido socialmente, es una tranquilidad personal el saber que este patrimonio de incalculable valor está custodiado, protegido y regulado.
La modalidad que yo escogí fue la de bajar caminando y subir en 4×4, particularmente para mi, la mejor opción; el tiempo de caminata desde el Centro de Interpretación de El Julan (inicio de la ruta) hasta Los Letreros (punto final de la ruta) es de aproximadamente dos horas; de los Letreros hasta alcanzar el 4×4 tenemos escasos 15 minutos de subida.
Mi más eterno agradecimiento a Christian y Rayko por un día que jamás olvidaremos, Melly y Carlos.



El Julan
Iniciamos la ruta en el Centro de Interpretación de El Julan, nuestro guía Rayko será quien nos acompañará a lo largo de todo el descenso hasta El Tagoror y Los Letreros, punto donde finalizaremos la ruta a pie para regresar al Centro de Interpretación de El Julan en 4×4. Una vez en el Centro nos invitarán a catar y disfrutar de los excelentes vinos propios de la isla de El Hierro y a una Quesadilla de la localidad de Guarazoca; posteriormente visitaremos el Centro de Interpretación de El Julan, un Centro realmente impresionante el cual ofrece un sin fin de información relativa a Los Bimbaches, a sus costumbres y a sus medios de vida.




zona arqueológica


Iniciamos ruta en constante y fuerte bajada, los puntos claves de tan bella ruta serán: La Cueva de Juan Baltasar, Los Números, El Tagoror, Los Concheros y Los Letreros.
























Cueva de Juan Baltasar:









Los Números:













El Julan – isla de El Hierro













Antiguamente esta maravilla arqueológica estuvo en serio peligro ya que cayó en manos privadas y el antiguo propietario quiso utilizar estos terrenos para crear una plantación de plátanos, estos pozos artificiales que observamos en la siguiente fotografía, fueron construidos para almacenar el agua que alimentaria dichas plantaciones de plátanos, el Cabildo recupero dichos terrenos y actualmente es lo que debe ser, una zona arqueológica digna de la máxima protección gubernamental; espero que en breve, un equipo experto en arqueología repare este daño eliminando de tan bello paisaje estas construcciones y devuelva a su origen lo que es y siempre fue, un terreno inmutable anclado a la cultura y estirpe Bimbache.


Miles y miles de lapas rodean este monumento y punto de reunión – El Tagoror – ; las conchas de las lapas – alimento clave de los Bimbaches – se encuentran esparcidas alrededor de tan bello paraje.










Los Letreros:







En la siguiente fotografía vemos un ejemplo de expolio, alguien se llevo parte de la roca con el consecuente petroglifo, un daño irreparable a un patrimonio universal único e irrepetible.

















En la siguiente fotografía vemos un acto de barbarie, un acto que no tiene nombre, alguien al lado de este tesoro arqueológico gravó su nombre (Esteban); que decir de este personaje? el mismo se define como un ignorante, un egocéntrico, un idiota nato a groso modo; si nosotros admiramos estos grabados pertenecientes a una cultura que perduró durante más de 2000 años, el día de mañana, quien estudie los nuevos grabados, se dará cuenta de la inteligencia de unos y de la ignorancia de otros, vivimos tiempos en los cuales la tecnología crece a nivel exponencial en oposición a otros valores que están a punto de extinguirse: respeto, educación, empatía, amor por la naturaleza, etcétera.







En escasos metros nos recogerá el 4×4 para regresar a lo que fue el origen de esta tan bella ruta por las tierras de El Julan, El Centro de Interpretación de El Julan.



Centro de Interpretación de El Julan:










Moldes de petroglifos dentro del Centro de Interpretación:






El Julán pasará a ser un referente cultural del Archipiélago cuando en 1873, Aquilino Padrón, posteriormente secundado por su hermano Gumersindo, da a conocer la existencia del conjunto arqueológico. Los estudios sobre los aborígenes de Canarias y sobre la sociedad anterior a la Conquista Europea tienen a partir de ese momento un nuevo referente.

El descubrimiento de los hermanos Padrón tiene amplio eco en la comunidad científica y en la sociedad canaria, tras su aparición en la prensa de finales del siglo XIX. El cónsul de Francia en Tenerife, Sabino Berthelot, difunde los hallazgos de El Julan, que conoce exclusivamente por las descripciones de los hermanos Padrón, padres y descubridores de El julan.

«Las mismas inscripciones puede ser que nos den un día la palabra del enigma, cuando se llegue a descifrarlas…Estas previsiones pudieran no realizarse jamás y que las inscripciones alfabéticas no conserven un interés real. Sin embargo, son la prueba de las relaciones antiguas entre la gente del Norte de África y estas islas»
La cultura es la sonrisa para todas las edades, puede estar en una madre, o en un amigo, o en la flor, o quizás se refugie en la dura piedra cincelada por una antigua civilización que perduró varios milenios…
A mis amigos Rayko y Christian…
Enlace a otra entrada relacionada con El Julan, cuando se solicitaba simplemente un permiso gratuito y se descendía en solitario: click
Estupenda descripción. Gracias por compartir 😀
Es muy fuerte la pendiente de la bajada?
Los desniveles de la «chiquita» (como se conoce también a la isla de El Hierro) son brutales; pega fuerte el desnivel hasta el Tagoror.