La Reserva Natural Integral de El Pijaral está integrada dentro del Espacio Protegido del Parque Rural de Anaga. Se trata de un ámbito que presenta un carácter muy escarpado y poco accesible, en el que existe una de las mejores representaciones de monteverde de Tenerife, con especies endémicas en peligro de extinción y protegidas, como la paloma rabiche y la paloma turqué. Asimismo, contiene estructuras geomorfológicas representativas y elementos naturales que destacan por su rareza o singularidad como los Roques de Anambro y Chinobre.
En el Parque Rural de Anaga se encuentran tres enclaves de especial valor: las reservas Naturales Integrales de Ijuana, El Pijaral y Los Roques de Anaga, que tienen el máximo grado de protección medioambiental para garantizar la conservación de sus frágiles ecosistemas.
El Monte de Aguirre es también una zona de acceso controlado, al tratarse de un antiguo bosque de laurisilva de condiciones singulares.
Se requiere de permiso administrativo para poder realizar esta ruta.
Os pongo el enlace para solicitar dichos permisos: click
El Pijaral – Reserva Mundial de La Biosfera – Anaga – Tenerife
Mirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – Tenerife Roque de Las ÁnimasMirador Cabezo del Tejo – Anaga – Tenerife AlmácigaMirador Cabezo del Tejo – Anaga – Tenerife BenijoMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – Tenerife Roques de Enmedio y de Las Ánimas – TagananaMirador Cabezo del Tejo – Anaga – Tenerife Reserva Mundial de La BiosferaMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – Tenerife El DraguilloMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeMirador Cabezo del Tejo – Anaga – TenerifeEl Pijaral – Anaga – Tenerife
Después de admirar las preciosas vistas desde el mirador Cabezo del Tejo continuamos la marcha por la pista de tierra en dirección al parking de Cabezo del Tejo:
El valle de Benijo fue habitado por los guanches, tal y como demuestran los diferentes hallazgos arqueológicos encontrados en la zona, pertenenciendo al menceyato de Anaga..
Una vez terminada la conquista de la isla por Alonso Fernández de Lugo en 1496, el valle de Benijo, rico en aguas, fue entregado a varios propietarios hasta que finalmente pasó en el siglo xvii a manos de las grandes familias absentistas que ya controlaban varios valles adyacentes.
El caserío aparece ya en 1536 constituido por casas, chozas, bodega y lagar, pero siempre fue escasamente poblado por los arrendatarios de los propietarios absentistas. Las tierras de Benijo fueron dedicadas al cultivo de la caña de azúcar y la viña.
El lugar tuvo una ermita dedicada a Santiago Apóstol que fue erigida hacia 1630 por el dueño de la heredad, Diego Pereira de Castro. Dicha ermita acabaría arruinándose a mediados del siglo xviii y no volvió a ser edificada.
El caserío fue desde su origen un pago (distrito, pueblo o aldea) del lugar de Taganana hasta la agregación de este último a Santa Cruz de Tenerife en 1877, pasando a ser ambos barrios de la capital.
En cuanto a las comunicaciones, como el resto de caseríos del macizo de Anaga, los habitantes de Benijo se comunicaban mediante diferentes caminos hasta la construcción de la carretera en la década de 1980. Esto significó la apertura del caserío al turismo, que a su vez ha posibilitado la permanencia de este enclave rural.
En el año 1994 el caserío pasa a estar incluido en el espacio protegido del Parque Rural de Anaga