Pasada la bonita localidad de Sabinosa, pequeña localidad desde la cual se abren rutas y senderos preciosos hacia la fuente de Mencáfete, hacia La Dehesa y hacia el Alto de Malpaso, cima de la isla chiquita con 1.501 metros de altitud, el paisaje empieza a transformarse en un mundo nuevo y extremo, un extenso malpaís a través del cual, una estrecha pista de asfalto, se fusiona con un paisaje de lava llevándonos a un mundo de naturaleza extrema, misticismo y armonía total. El pueblo de Sabinosa es la entrada hacía unos paisajes lunares donde la imaginación te lleva a mundos relatados en viejos cuentos de ciencia ficción.

Pasado Sabinosa el paisaje se transforma rápidamente en un bello desierto de lava moteado de rastrojo y hierba propia de la zona, una combinación que hace de este paisaje algo nuevo para mis ojos, en ninguna de las otras islas había observado ni por asomo lo que estoy viendo aquí, un tapiz natural donde la fuerza de la naturaleza se dibuja y se describe así misma ante un horizonte en el cual ya no existe nada, solo un azul infinito, el fin del mundo antiguo.
Playa de Arenas Blancas:












El Paisaje es asombroso; conducimos durante kilómetros entre un campo inmenso de lava, pincelada por verdes de una escasa vegetación que hace de este entorno algo maravilloso, una combinación de colores y texturas únicas y asombrosas.

La playa de El Verodal es una solitaria playa de arena roja bajo un entorno natural solitario y silencioso, una experiencia inolvidable donde el Atlántico acaricia la tierra más recóndita de España.





Dejamos atrás la playa roja de El Verodal y comenzamos a ganar altura, en dirección a Los Reyes, el paisaje que se abre a la mirada es apocalíptico. Desde el mirador de El Lomo Negro la vista es conmovedora.









Observamos la diferencia de verdor dependiendo de si es invierno o verano, la intensidad de los colores gana fuerza después de los meses de lluvias.



Malpaís de El Hierro y los roques más occidentales de las Islas Canarias, con un arco de lava espectacular conocido como La Tosca. Un paisaje extremo.












Arco de La Tosca

Arco de La Tosca

Arco de La Tosca



Estamos muy próximos al santuario Virgen de Los Reyes, así como de Orchilla y el Meridiano Cero. Nuevos contrastes y cambios pronunciados de paisaje se vuelven a abrir ante nuestros ojos. El Hierro es un sueño dentro de otro sueño del cual no quieres despertar.
Orchilla, el fin del mundo antiguo:































No hay matemáticas en este pequeño mundo, solo caos y destrucción, el Hierro es el origen de un mundo nuevo, una nueva vida alejada de un mundo viejo y decrépito donde la raza humana lo degradada y contamina sin piedad…