

Bentago, guanarteme de Telde, murió tempranamente hacia el año 1475 dejando en herencia un reinado en guerra, Bentejuí era un niño cuando su padre falleció; nacido bajo la sombra de un poderoso ejercito invasor, creció y vivió desde su niñez bajo el legado de la guerra. Al ser éste menor de edad, su tío y guanarteme de Galdar, Tenesor Semidan, se hizo cargo del pequeño Bentejuí regentando el guanarteme de Bentago, Tenesor se convirtió en rey absoluto de Gran Canaria, y bajo su férrea mano, Bentejuí se hizo hombre, siendo forjado como líder, estratega y guerrero en un mundo que ardía en la violencia más absoluta, todas las islas estaban cayendo bajo las cruentas manos de una Corona de Castilla cuyas ansias de poder y conquista no tenían parangón.
Pocos años después de la muerte de Bentago le llegó también la hora a Tenesor Semidan; gravemente herido en combate por las ballestas vizcaínas del comandante Miguel de Mújica – alrededor del año 1481 -, y a las puertas de la muerte defendiendo la ciudad de Galdar, éste transmitió un último aliento a quién ya regía como hombre y rey de Telde, un fornido Bentejuí cuyos juegos de niñez siempre fueron las armas y la guerra…
«Hijo mío, todavía Canaria no ha desaparecido del mundo, y aquí la tienes sobre estos cerros, defiéndela hasta la muerte pues no habrá vida sin victoria.»
Con estas palabras nació una leyenda, un guerrero, y una ruta: La Ruta de Bentejuí.

La Culata – Riscos de Tirajana

La Ruta de Bentejuí

La Culata – Riscos de Tirajana
En los capítulos finales de la conquista de Gran Canaria el último guerrero Bentejuí Semidan hizo leyenda junto al faycan y sacerdote de Telde Tazarte, una última y desesperada resistencia que no cedió ante un tratado – la Carta de Calatayud – que sumía a la rendición y sumisión total de los Canarios ante La Corona de Castilla, Corona regentada por los Reyes Católicos. A esta Carta o Tratado le siguieron 2 años de constante y encarnizada lucha ante un rival a quien Bentejuí y Tazarte jamás recularon, un rival y enemigo muy superior tanto en hombres como en tecnología armamentística, no así en tácticas de guerrilla en una abrupta naturaleza muy desfavorable para el ejercito castellano, terreno donde la orografía se transformó en la mejor baza guanche y en la peor de las pesadillas para los castellanos.
La isla estaba dividida en dos reinos o guanartemes, el de Galdar y el de Telde; con la definitiva caída del guanarteme de Galdar, Bentejuí y Tazarte unidos bajo una misma convicción, inician un periplo bélico hacia el interior de la isla que les conducirá finalmente hasta la Fortaleza de Ansite, una ruta épica que ha sobrevivido al paso de los siglos hasta nuestra actualidad, una ruta que bautizó nombres como el de Ajódar, batalla donde el gobernador Pedro Vera y su ejercito, comandado por quien asesinó a Tenesor – Miguel de Mújica – quedó literalmente arrasado en la Montaña Hogarzos, montaña que fue la tumba de cientos de castellanos viéndose sorprendidos ante la ira de un Bentajuí que supo liderar y guiar a su ejercito guanche en innumerables batallas bajo el estandarte de la victoria.
Ajódar se repitió siglos después en otro continente y con otros protagonistas, La batalla de Little Bighorn, donde el general George Armstrong Custer y su séptimo de caballería, contando con sus rifles winchester de última generación, quedó literalmente arrasado por una coalición india que al igual que los guanches hicieron leyenda.
Jamás los Castellanos se vieron sometidos al terror que se les impuso aquí en la isla de Gran Canaria, guerra de guerrillas bajo una orografía, ante la cual, todo el poderío castellano se vio estéril y continuamente superado; impotentes, frustrados y derrotados una y otra vez, batalla tras batalla, en un terreno cuyos barrancos encajados en V se convertían en tumbas abiertas donde ríos de sangre castellana anegaron y regaron sus cauces; senderos aéreos de afiladas aristas, escarpes de vértigo, cañadones y estrechos pasos que se transformaban en verdaderas ratoneras para unos castellanos aterrados, fuego e ira de un pueblo genéticamente pacífico que se vio forzado a la más extrema de las violencias para defender una tierra, unas familias y una cultura milenaria que finalmente sucumbió bajo el grito orgulloso de «Atis Tirma» en el último reducto y batalla, La Fortaleza de Ansite.
El grito de Atis Tirma (Atis – o Axit -, significa “viva”, y Tirma – o Dirma -, “montaña sagrada”); Viva La Montaña Sagrada!.
La Fortaleza – Santa Lucía de Tirajana

Mirador El Guriete



Cima de La Fortaleza de Ansite:

Risco Blanco – Paso del Perro – Pico de Las Nieves
Tras un buen desayuno en el Hotel Las Tirajanas salgo de San Bartolomé de Tirajana (Tunte) en dirección a Santa Lucía por la GC65, en escasos kilómetros una estrecha carretera se abre repentinamente a mano izquierda en dirección directa a los imponentes Riscos de Tirajana, abandonamos la GC65 en dirección a Taidía a través de una sinuosa y estrechísima carretera que nos sumerge de lleno en la historia que una vez sucedió y que, en estos mismos parajes y escondidas veredas, una lejana leyenda viaja en la memoria del olvido…
Tunte

Risco Blanco
Aparco el coche en el diminuto pueblo de Risco Blanco y en dirección al pueblo de La Culata nos adentramos en los Riscos de Tirajana en búsqueda de un minúsculo paso que nos elevará entre laberínticos pasos de piedra hasta la meseta y cumbre de Gran Canaria.

Pico de Las Nieves





La Culata





La Culata





Abandonamos definitivamente el asfalto y las empinadas calles de Risco Blanco y nos adentramos de lleno en los gravitatorios muros de Tirajana, el Paso del Perro nos conducirá en vertical hasta la Mesa de Las Vacas a través de largas aristas de funambulista, tramos de literal escalada, y pasos aéreos bajo un paisaje agorafóbico hasta alcanzar la meseta, pinar y cumbre de Gran Canaria.

Risco Blanco es un domo fonolítico cuya erupción explosiva y extremadamente violenta lo diferenció del resto de montañas pintándolo de blanco, el esqueleto de este viejo volcán resalta a lo largo de esta gran muralla de piedra de nombre Tirajana, topónimo guanche cuyas hipótesis no aciertan a encontrarle traducción.






Paso del Perro


Riscos de Tirajana
























Mesa de Las Vacas – Degollada de Bermeja (1.700 metros de altitud)
Tras haber superado el Paso del Perro el camino se relaja y nos devuelve a la horizontalidad, pistas de tierra en suave pero continuo ascenso nos llevarán bajo un denso pinar calcinado hasta la cima de la isla, el Pico de Las Nieves y el Morrón de La Agujereada, una altitud que roza los 2.000 metros de altitud. La altura ganada desde que partí de Risco Blanco es espectacular, todo el valle de Tirajana se abre de par en par bajo unas panorámicas que literalmente emocionan…











El incendio que ha devastado la cumbre de la isla de Gran Canaria fue provocado, según ha aseverado el Cabildo de Gran Canaria. El consejero de Medio Ambiente, Miguel Ángel Ramírez, ha asegurado que: «se ha descartado que se haya producido por causas naturales o uso de maquinaria por lo que solo resta como principal hipótesis que haya sido intencionado o una colilla». En estos momentos, Guardia Civil y efectivos del Cabildo trabajan conjuntamente para interrogar a los testigos del incendio e intentar localizar al presunto autor del macabro siniestro.
Al respecto, Miguel Ángel Ramírez recordó que: «la primera llamada de alerta que se registró fue la del personal de una ambulancia que pasaba por el lugar. Estamos buscando al presunto autor para que todo el peso de la ley caiga sobre él. El daño ha sido dantesco para la Isla y sus vecinos, y lo más trágico es la pérdida de una vida humana cuando intentaba defender su casa, sus enseres, sus animales…»
«El fuego que se originó el pasado miércoles en Gran Canaria sigue activo, aunque bajo control por parte de los técnicos en extinción de incendios forestales que siguen trabajando para reducirlo a cenizas. Hay algo de fuego subterráneo y aún hay brasas que tratan de ser extinguidas pero por suerte la meteorología acompaña. Para este lunes, de hecho, se prevé que haya chubascos fuertes en la zona afectada», y de hecho los hubo. Tras 5 días de verdadero infierno la calma regresó a la cumbre. Septiembre del 2017 será recordado durante mucho tiempo por haber sufrido uno de los incendios más devastadores de las últimas décadas.
En total ha ardido una zona perimetrada en 2.800 hectáreas a lo largo de 5 infernales días, zona que afecta a nueve municipios, habiéndose llevado la peor parte la Vega de San Mateo y Tejeda. Un tercio de la superficie devastada es pino canario, mientras que el resto se trata de algunos árboles frutales, castaños y monte bajo.
El incendio que arrancó con gran virulencia y ha sido definido por Antonio Morales, presidente del Cabildo de Gran Canaria, como un “tsunami de fuego”, es el más peligroso y hambriento que se recuerda según los vecinos de la isla.
En la zona siguen trabajando cerca de un centenar de efectivos con la intención de reducirlo a la nada. Hasta entonces, el Cabildo de Gran Canaria sigue tomando medidas que afectan a la movilidad de las personas en distintas áreas de la cumbre de Gran Canaria. Hay varios centenares de ciudadanos que siguen sin luz y teléfono, si bien las autoridades han informado de que a lo largo de esta semana esperan restablecer la energía y las conexiones.


“Sin incendios, no habría vida en la Tierra”, aunque esa afirmación científica parece una paradoja después de que la cumbre de Gran Canaria lleve días ardiendo; y sin embargo, los incendios son la clave para mantener la concentración de oxígeno adecuada en la atmósfera; el fuego regula el ciclo del carbono y la vida, tal como la conocemos, la vida está basada precisamente en el carbono. Aunque solemos pensar en los incendios como un invento humano que mata plantas, animales y personas, el fuego, como ocurre con la lluvia y el viento, es un componente natural esencial, básico para mantener la biodiversidad del planeta. Al menos hace 400 millones de años que la Tierra arde de forma sistemática y a diario. Los satélites que observan el planeta envían imágenes en las que se aprecian miles de fuegos quemando a la vez. África es, sin duda, el continente que más arde. Y lo hace durante meses…
No obstante, esos incendios salvajes necesarios para mantener el equilibrio de la naturaleza, ahora están cambiando tanto de intensidad como de frecuencia debido a la acción humana y están dejando de ser beneficiosos.


En breve conectaremos con el asfalto, el tramo de carretera GC135 nos conducirá a través de dos de los pozos de nieve más famosos y con más historia de la isla de Gran Canaria, Pozo Grande y Pozo de Los Canónigos, hasta alcanzar el Mirador Pico de Las Nieves, techo y cima de la isla de Gran Canaria.




GC135

Puntón de La Agujerada – Pico de Las Nieves







Pico de Las Nieves (1.949 metros de altitud) y Morrón de La Agujereada (1.958 metros de altitud)
Tras descansar un poco en la cima de la isla y recrearme con unas vistas de infarto, me concentro para iniciar un vertiginoso descenso hasta cerrar esta majestuosa circular por el corazón canario.





La Degollada de Piedras Blancas da acceso a un barranco encajado y vertical que se precipita bajo inmensos murallones de piedra, grietas que dan origen a dos cañadones unidos por un minúsculo paso en el cual apenas cabe un hombre, el paso de Panantón, un agujero que une el Cañadón Sombrío con el Cañadón del Jierro, senderos de sangre donde centenares de castellanos conquistadores palidecieron de terror ante el vacío de Tirajana, una caldera erosiva ante la cual Bentajuí desafió a la gravedad para alcanzar su destino final, la Fortaleza de Ansite.





Cañadón Sombrío











Paso de Panantón
El Cañadón Sombrío finaliza en un estrecho agujero, única vía de conexión y paso al siguiente cañadón, el del Jierro, estamos ante el Paso de Panantón.

Paso de Panantón

Paso de Panantón

Paso de Panantón
Cañadón del Jierro















































De vuelta a las extensas playas del Sur de Gran Canaria a través de la carretera GC60 hago una breve parada en uno de los miradores más bellos de la isla, el Mirador de las Yeguas.
Fataga – Mirador de Las Yeguas
El paisaje desde el mirador de la Degollada de las Yeguas, en el sur de Gran Canaria, sorprende a quien lo visita sin saber lo que va a encontrar. Se trata una panorámica del barranco de Fataga, un cañón de 15 kilómetros de recorrido, sinuoso, ancho y profundo, de laderas suavemente abombadas que, de repente, culminan en riscos casi verticales y desafiantes. Todo ello, tapizado de vegetación de zonas áridas y con el mar al fondo. El conjunto es monumental, multicolor y evocador.




Canaria cae el 29 de Abril del 1483
Bentajuí fue un estratega cuya mejor arma fue la propia naturaleza, una naturaleza construida bajo la furia del viento, el agua y el fuego.
Carlos Antolin Carruesco
Hice la ruta de Bentejui hace más de veinte años y el recuerdo que tengo es el de la bajada a Tirajana por un camino estrecho y entre riscos, que doy por hecho es el del Cañadón del Jierro.
Realmente está tan peligroso?
Gracias!
Evitarlo en días de lluvías, es algo laberíntico y tiene pasos algo expuestos, en los cuales, seguridad de paso total. El terreno está bastante descompuesto. Peligroso? es muy subjetivo una opinión al respecto, lo que si puedo decir es que es una bajada larga y exigente que a veces requiere de intuición para no perderse en una senda que muchas veces se pierde y te puede llevar a grandes precipicios. Poco transitada por no decir nada transitada. Camino descatalogado por parte del Cabildo.